Tradición
Son numerosas las ermitas que en un tiempo pertenecían a Lodosa, si bien la mayoría no se conservan en la actualidad.
Dentro de este amplio grupo se encuentra la ermita de la Virgen de las Angustias, de 1682, la de Vera Cruz, de 1771, y la ermita de San Blas, de 1726.
Permanecen de pie, dentro del casco urbano, la ermita de Nuestra Señora de Monserrat, el Calvario (1937) y las Tres Marías (1940), y a corta distancia del caserío, la ermita de San Emeterio y San Celedonio, en pleno regadío, donde también se venera a San Gregorio.
La ermita de Nuestra Señora de Monserrat se comenzó a construir en 1759, y hasta hace poco tiempo servía de iglesia al hospital de las Hijas de San Vicente. Presenta planta de cruz latina dividida en cinco tramos, con cabecera y brazos del crucero rectos, cubiertos con bóvedas de cañón con lunetas, y la parte central del crucero con bóveda octogonal gallonada. La imagen titular de la Virgen es barroca, del siglo XVII, al igual que la de San Emeterio y San Celedonio.
Esta última ermita tiene una única nave y dos brazos laterales con cubierta en artesa, presididas por las imágenes de los santos titulares, Emeterio y Celedonio, del siglo XVII y otro más pequeña de San Gregorio Ostiense, del siglo XVIII.